¿Tengo que ser “estirado” para que me acepten como autor?

 

No es justo generalizar y decir que todos los escritores son estirados, ya que las personalidades y comportamientos varían ampliamente entre individuos. Sin embargo, algunas personas podrían percibir a los escritores como estirados por varias razones:

 

Introspección y concentración: La escritura a menudo requiere un alto grado de concentración y reflexión profunda. Los escritores pueden parecer distantes o ensimismados cuando están inmersos en su trabajo, lo que puede dar la impresión de ser estirados.

 

Sensibilidad artística: Muchos escritores son altamente sensibles y emocionales, lo que puede hacer que sean más propensos a experimentar altibajos emocionales. Esto podría llevarlos a parecer distantes o inaccesibles en ciertos momentos.

 

Necesidad de soledad: La mayoría de los escritores prefieren trabajar en un entorno tranquilo y a menudo necesitan tiempo a solas para concentrarse en su escritura. Esto puede dar la impresión de que son distantes cuando rechazan invitaciones sociales o pasan mucho tiempo en su propio mundo.

 

Crítica constante: Los escritores a menudo enfrentan críticas y rechazos en su trabajo, lo que puede llevarlos a ser más críticos o cautelosos en sus interacciones personales. Esto puede ser percibido como una actitud distante.

 

Compromiso con su arte: Algunos escritores pueden ser apasionadamente dedicados a su trabajo y pueden estar dispuestos a sacrificar otras actividades sociales para seguir su vocación. Esto podría dar la impresión de que son distantes o inflexibles en su enfoque.

 

Es importante recordar que estas características no son exclusivas de los escritores y pueden encontrarse en personas de cualquier profesión. Además, no todos los escritores se ajustan a esta descripción, y la percepción de que son estirados puede ser subjetiva. Cada escritor es un individuo con su propia personalidad y motivaciones.

 

¿Hay alguna regla de conducta que deba llevar un escritor para ser aceptado como tal?

 

No existe un único "prototipo" de escritor ni una forma específica en la que todos los escritores deban actuar. La imagen del escritor puede variar ampliamente según la sociedad, la cultura y la época. Sin embargo, a lo largo de la historia, ha habido estereotipos y expectativas asociadas con la figura del escritor en la sociedad.

 

Algunos de estos estereotipos incluyen:

 

El escritor bohemio: Este estereotipo se refiere a la idea de que los escritores son personas bohemias, despreocupadas por las convenciones sociales, a menudo luchando contra la pobreza o la adversidad en busca de la inspiración artística.

 

El escritor solitario: A menudo se asume que los escritores pasan largas horas en soledad, inmersos en sus pensamientos y trabajando en su obra. Esta imagen refleja la idea de que la escritura es un proceso introspectivo.

 

El escritor atormentado: Algunas personas creen que los escritores deben estar emocionalmente atormentados o enfrentar desafíos personales para ser verdaderamente creativos. Este estereotipo se basa en la idea de que el sufrimiento alimenta la creatividad.

 

El escritor excéntrico: A menudo se retrata a los escritores como individuos excéntricos, con hábitos peculiares o manías. Esto puede incluir preferencias alimenticias inusuales, horas de trabajo inusuales o incluso obsesiones temáticas particulares en su escritura.

 

El escritor intelectual: Se espera que los escritores sean intelectuales y que tengan una profunda comprensión de la literatura y la cultura. Esto puede llevar a la percepción de que los escritores deben ser eruditos.

 

Sin embargo, es importante destacar que estos estereotipos no son representativos de todos los escritores, y muchas personas que escriben no se ajustan a estas imágenes. La escritura es una actividad creativa que abarca una amplia gama de estilos, géneros y enfoques, y los escritores son tan diversos como las obras que crean. En la actualidad, la sociedad tiende a reconocer la diversidad en la escritura y a valorar la autenticidad de los autores, lo que ha llevado a una mayor aceptación de diferentes formas de ser escritor.

 

¿Cómo no caer en esos prototipos?

Un consejo valioso para escritores que desean mantener su autenticidad y evitar caer en estereotipos para ser aceptados es el siguiente:

 

Sé fiel a ti mismo y a tu voz: En lugar de tratar de encajar en un prototipo predefinido de escritor, concéntrate en desarrollar tu propia voz y estilo únicos. Escribe desde tu corazón y sobre temas que te apasionen. No te sientas presionado por conformarte a las expectativas de lo que "debería" ser un escritor.

 

Explora diferentes géneros y estilos: La escritura es una forma de expresión creativa, y no hay una única manera "correcta" de hacerlo. Experimenta con diferentes géneros, estilos y enfoques. Descubre lo que te hace sentir más auténtico como escritor y qué tipo de escritura te hace feliz.

 

No temas la crítica: La crítica es parte del proceso de escritura, pero no dejes que te influya demasiado. Escuchar opiniones constructivas puede ser útil para mejorar tus habilidades, pero no dejes que las críticas negativas te hagan dudar de tu voz o estilo. Confía en tu visión y en tu creatividad.

 

Conéctate con otros escritores: Unirse a grupos de escritores, asistir a talleres literarios y conectarse con otros autores puede ser valioso. Puedes aprender mucho de la experiencia de otros escritores, pero recuerda que tu viaje como escritor es único y personal.

 

Lee ampliamente: La lectura es una fuente de inspiración y aprendizaje constante para los escritores. Lee una variedad de autores y géneros para ampliar tu perspectiva y descubrir nuevas formas de expresión.

 

Define tus propios objetivos: En lugar de medir tu éxito como escritor en función de los estereotipos o las expectativas externas, establece tus propios objetivos y estándares. Pregunta qué es lo que realmente deseas lograr con tu escritura y trabaja hacia esos objetivos de manera auténtica.

 

Mantén la pasión: La pasión por la escritura es lo que te impulsará a seguir adelante. No te dejes llevar por las tendencias o las presiones externas. Mantén tu amor por la escritura en el centro de todo lo que haces.

 

Recuerda que ser un escritor auténtico significa abrazar tu singularidad y permitirte evolucionar como artista a lo largo del tiempo. No te preocupes por encajar en un molde predefinido; en su lugar, busca tu propio camino y encuentra tu voz única en el mundo de la escritura.

 

Si deseas evitar caer en el estereotipo de un escritor estirado y en lugar de eso, ser auténtico y aceptado por la sociedad, aquí tienes algunos consejos:

 

Sé accesible y amigable: No te cierres a las interacciones sociales. Participa en eventos literarios, clubes de lectura y redes de escritores. Establecer conexiones con otros escritores y lectores puede enriquecer tu experiencia y ampliar tu audiencia.

 

Escucha a los demás: Demuestra interés genuino por las ideas y opiniones de los demás, tanto dentro como fuera del mundo de la escritura. Escuchar y aprender de diferentes perspectivas puede enriquecer tu escritura y tu vida en general.

 

Comparte tus desafíos y vulnerabilidades: No temas hablar de los desafíos que enfrentas como escritor. Ser honesto acerca de tus luchas puede hacer que te resultes más humano y accesible para otros que puedan enfrentar situaciones similares.

 

Muestra humildad: Reconoce que siempre hay más por aprender y mejorar en tu escritura. No te creas superior a los demás escritores o lectores. Apreciar la humildad puede ganarte el respeto de otros.

 

Comparte tus conocimientos: Si tienes experiencia o conocimientos que pueden ser útiles para otros escritores, compártelos sin reservas. Ayudar a otros a crecer y aprender puede generar aprecio y respeto.

 

Explora diferentes estilos y géneros: No te límites a un solo estilo o género de escritura. La versatilidad y la disposición a experimentar pueden romper los estereotipos y mostrar tu creatividad.

 

Mantén una mente abierta: Acepta las críticas constructivas y busca siempre mejorar tu trabajo. Una mente abierta y dispuesta a aprender te ayudará a crecer como escritor.

 

No te tomes demasiado en serio: Aunque la escritura es una forma seria de expresión artística, no olvides el sentido del humor. Mostrar una actitud relajada y un sentido del humor puede hacerte más agradable y accesible para los demás.

 

Escribe desde el corazón: En lugar de escribir para encajar en un molde predefinido o para cumplir con las expectativas de la sociedad, escribe lo que te apasiona y lo que sientes profundamente. La autenticidad en tu escritura puede conectarte con los lectores de una manera más significativa.

 

Celebra tu individualidad: Abraza tu singularidad como escritor y no temas ser diferente. La originalidad y la autenticidad son cualidades valiosas en la escritura y pueden ayudarte a destacar.

 

Recuerda que cada escritor es único y no hay un solo camino hacia el éxito en la escritura. Ser auténtico y estar dispuesto a aprender y crecer es clave para construir relaciones significativas en el mundo literario y para romper estereotipos que puedan limitar tu desarrollo como escritor.